Inmarcesible

 " Gigante Blanco de Franjas Negras" Por: Yorglenis Michelle      Aún recuerdo el sonido del mar al golpear las rocas y la manera como desde lo alto, mi cabello se movía al compás del viento y me sentía en la cima del mundo. Fue en verano cuando mi padre me llevó a conocer a aquel gigante blanco de franjas negras que se alzaba sobre la tierra y que entre susurros hipnóticos, que creí que solo escuchaban los torreros, me invitaba a subirlo. Escaleras en espiral nos dieron la bienvenida y al acercarnos a la garita, fue cuando entre pequeños saltos de victoria, aceleré el paso y me embargó una profunda sensación de melancolía, que lejos de oponerse a la sonrisa que se había dibujado en mi rostro, la dotaba de la belleza propia de los momentos que no merecen ser olvidados. Desde las alturas, donde el silencio se codeaba con calma, pude apreciar los barcos que se encontraban en el puerto y la ciudad parecía convertirse en el escenario ideal para una novela, donde el Far...

Desde la inocencia y la picardía propia de la niñez, hasta la libertad expresada en la frescura de los momentos que se disfrutan aunque se tenga poco, porque representan mucho. Y es que recordar desde la nostalgia es parte de sentirse vivo, echarle una mirada al pasado es impulsar nuestro presente, ya que nos hace valorar lo que fuimos y abrazar lo que somos. Caracas se viste de tonos cálidos y fríos en medio del caos, del miedo, de la expectativa y la desesperanza. Ayer al contemplar los murales pude reconocerme en sus trazos y hoy sé que valió la pena mojar mis zapatos en medio de la lluvia, comer catalinas y galletas bajo un Sol que amenazaba con quemarme, ver a un señor de avanzada edad hacer ejercicios de matemática en una libreta, a otro grupo jugando ajedrez y a un grupo de chicos patinando sobre la desventura, riéndose de la locura de la otrora ciudad de los techos rojos. Escrito: De mi autoría. Intervenciones urbanas "La Belleza de Vivir" @labellezadevivirlacalle Art...